los jilgueros de la CIA y el Pentágono (Leo y León con sus amigos) discuten sobre temas relativos a la democracia moderna:
--¿se vale el asesinato selectivo si lo realiza el Estado? ¿y el ajusticiamiento sin previo juicio en tribunales? ¿acaso --pregunta otro, que parece más achispado-- la verdadera satisfacción del sentimiento de justicia de los que sufrieron la desaparición de sus seres queridos en manos de los terroristas no podría cumplirse sino con el asesinato de los hijos de esos terroristas?
Sale el ojo por ojo en los letrados que le vendieron su alma al Diablo por "ser alguien".
El criminal es aquel sobre quien cae el bando. Revísese al respecto a Giorgio Agamben en su Homo Sacer. Así podrá saberse que el Estado asesinando por medio de un decreto (bando) abarca en su tarea, como brazos ejecutores, a los grupos e individuos de la "sociedad civil" puestos a exterminar al fuera de la ley. El Estado del capital a nivel mundial colocó desde 1919 el exterminio en la cotidianidad de una crisis cíclica.
Cualquier intento revolucionario en México pasa por la expropiación de las televisiones de manos de los grandes capitalistas. Y a la dictadura del capital, habrá de imponerse la dictadura del proletariado.
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