Esa pequeña sonrisa de la chelista
después de la cadencia en la segunda frase,
aunque ahora mismo se haya reunido
el Consejo de Seguridad;
la profunda seriedad con la que la mujer allí
en las ruinas de su cocina americana se maquilla,
aunque en el barrio del Gobierno
aún se siga disparando;
la pelea conyugal de esos ochentones,
por los pelos del gato en la cama,
aunque las negociaciones de paz
hayan entrado en la fase decisiva;
la aullante miseria por la taza de aniversario
que la criada ha hecho trizas,
a pesar de que el Fondo Monetario en el mismo momento
haya negado el crédito de ayuda;
y detrás del henil la pareja de enamorados
desmayada y jadeante de celo,
a pesar de que
Hans Magnus Enzensberger en Más ligero que el aire (Leichter als Luft)
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