huelga general en Grecia y en Bolivia: la crisis

El colmo del absurdo: se tiene que leer El País o algún otro periódico europeo para enterarse de que en Bolivia la Central Obrera Boliviana (COB) declaró la huelga general y tiene paralizadas las regiones que apenas el año anterior amenazaban con desbordarse contra el gobierno de Evo Morales del lado de la llamada derecha terrateniente. La marometa histórica está lejos de verse en las redacciones populistas institucionalizadas que exigen todavía unidad a toda costa atrás del MAS.

Se puede leer Granma, La Jornada, y nada, nomás no te enteras. ¿Será eso a lo que se refería Pablo González Casanova al mencionar la diabolización de ciertas organizaciones, luchadores sociales e intelectuales críticos por la izquierda institucional? Y una izquierda que se reconoce "moderna" hasta (y sobre todo) en la redacción de Milenio, ¿pensará seriamente que puede continuar haciendo "política" suprimiendo e ignorando a los "radicales" y "ultras" (provocadores al servicio de causas bien turbias) aquí y acullá? ¿De verdad es tan ingenua esa izquierda como para suponerse con la fuerza ideológica sobre el movimiento de masas, al grado de evidenciarse como profundamente antisindical y antiobrera?

La situación es delicada y aguda por las perspectivas a las que abre paso. Las cartas de la izquierda institucional parecen haberse agotado. De ahí, y no de otra cosa, el silencio miserable que sus escribanos guardan. El caso es que, hoy, cinco de mayo, tenemos huelga general en Grecia y en Bolivia. Se cae, de un lado, el viejo estado griego, y cae en brazos del Fondo Monetario Internacional, lo cual significa, geográficamente, en brazos de Estados Unidos y Alemania, por lo pronto...; y la caída --¡he aquí lo novedoso!-- ocurre cuando la carta latinoamericana de la "izquierda institucional" se ve rebasada por la izquierda por la central obrera con mayor experiencia política en toda América, la COB (darle a Luciano la bibliografía de su maistro Zavaleta).

También el hecho de que los sindicatos --en ambos casos-- empiecen a ocupar su espacio histórico natural en ambas geografías, debe hacer parte de nuestras notas del día. En Grecia, a diferencia de Francia, los sindicatos se incorporaron no para combatir en la práctica las reivindicaciones urbanas de la banlieue, sino para agudizar la crisis política con su acción de hoy.

Siga hablándose de los precios del azúcar en la burocracia cubana..., están siendo rebasados.

http://www.elpais.com/articulo/internacional/principal/sindicato/boliviano/declara/huelga/general/Morales/elpepuint/20100505elpepuint_1/Tes